Este martes se sentará en el banquillo de los acusados de la Sección Cuarta de la Audiencia Provincial de Pontevedra un Guardia Civil por «abuso de función» al extorsionar a una prostituta, a la que previamente había asistido como víctima de violencia de género, para que se acostara con él.
Según lo dicta el escrito de la acusación fiscal, el agente, conocedor de la situación de la víctima, le ofreció una ayuda económica para el alquiler y un lugar donde «preservar su seguridad», aprovechándose así del desamparo en el que la mujer se encontraba.
«Ante la insistencia del acusado», la víctima accedió y el acusado la «llevó a su domicilio», donde mantuvieron relaciones sexuales. «Al preguntarle ella después por el dinero ofrecido por el alquiler, le dijo que no había sido lo que esperaba y le tiró unas monedas con gesto despectivo«, dicta el escrito oficial.
El agente de la autoridad se enfrenta a 18 meses de prisión y la inhabilitación total de su cargo durante 7 años. Se le acusa de delitos de solicitud sexual, negocación y actividad prohibida al funcionario y de abuso de su función.
