Las trabajadoras del hogar se enfrentan a múltiples desafíos laborales, como no disponer de días para asuntos propios, programas de prevención de riesgos laborales o posibilidad de sindicarse. Almeida ha decidido que esto no es suficiente para este sector, así que además ha dejado sin ayudas al único centro en España que permitía su unión como trabajadoras.
Se trata del Centro de Empoderamiento para Trabajadoras del Hogar y Cuidados en España, gestionado por la asociación Servicio Doméstico Activo (SEDOAC). A solo seis meses de su apertura, su supervivencia se está viendo en grave riesgo.
Este domingo, el centro contará con la visita de un relator de la ONU de Derechos Humanos con el fin de visibilizar las pésimas condiciones laborales que vive este sector.
El anterior gobierno madrileño le otorgó una ayuda de 200.000 euros, subvención que el actual gobierno de Almeida ha decidido no renovar, sin aportar ninguna explicación ni contestar ninguna llamada o mensaje de las afectadas.
La secretaria de SEDOAC Edith Espinola afirma que, a pesar de esto, la actividad del centro no se ha detenido gracias a «un montón de aliadas y redes de apoyo». Una psicóloga y una abogada continúan ofreciendo sus servicios de forma voluntaria y gratuita los fines de semana.
Asimismo, el centro proporciona un espacio donde las trabajadoras puedan encontrarse y descansar. «Necesitan un espacio donde desconectar, especialmente las internas en su día libre. Que sientan que no se quedan atrapadas en su empleo«, defiende Espinola.
