La Junta de Andalucía ha determinado este lunes que en el plazo máximo de diez días, el jubilado Guillermo Cana está obligado a sacrificar a sus diez ovejas.
El motivo que defiende esta decisión es, según la Junta, que se trata de una explotación clandestina y acusa de los propietarios de los animales de usarlos para autoconsumo. Guillermo recibió en junio una visita de una inspección veterinaria venida desde la Junta, y al anciano no disponer de un certificado veterinario que indique que los animales que cuida desde recién nacidos están en perfecto estado, los inspectores le sancionaron con una falta grave.
PACMA, en defensa del hombre, indicó que las acusaciones fueron negadas por el propio Guillermo, por su familia y por numerosos vecinos, subrayando que tiene un «gran interés» en salvar la vida de los animales.
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«La legislación andaluza condena a muerte a animales sanos, sin ocuparse en comprobar primero si verdaderamente son contagiosos de alguna enfermedad o por el contrario están completamente sanos», apuntaron desde el partido animalista.
El dueño de los animales ya ha denunciado y recurrirá la orden administrativa, al igual que PACMA, que opina que las ovejas no han padecido ninguna explotación clandestina.
La @AndaluciaJunta va a sacrificar a las ovejas de Guillermo Caba, quien las ha criado a biberón. @JuanMa_Moreno subirá todos los vídeos de perros que quiera, pero sus actos delatan lo poco que le importan los animales. pic.twitter.com/LbjlAX8wg3
— PACMA Andalucía (@PACMAAndalucia) July 30, 2019
