La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, tiene todos los ojos sobre ella ya que, pese a que la capital fue la región más afectada por el coronavirus en su momento, en este momento de extendidos rebrotes en toda España no se reportan apenas casos.
Varios expertos han dudado de la veracidad de los datos que aporta el Gobierno madrileño sobre sus contagios, como el epidemiólogo Bonaventura Clotet. Máxime cuando Madrid y Canarias son las únicas comunidades autónomas donde a día de hoy no es obligatorio usar la mascarilla.
En medio de grandes sospechas, la dirigente del PP ha vuelto a afirmar que en Madrid todo va bien, pese a la grave situación del resto del país.
«Por ahora, tal y como está evolucionando la epidemia, las cosas están contenidas, pero seguimos vigilantes», ha dicho Ayuso tras su participación en la sesión ‘La sociedad abierta y sus enemigos’, un acto dentro de los Cursos de Verano de El Escorial 2020 organizados por la Universidad Complutense de Madrid.
Ayuso ha reconocido que la situación sanitaria en Madrid en los primeros momentos de la pandemia «fue mal». No obstante, ha reclamado que no se cuestione la razón por la que la región no da los mismos contagios y que se deje de acusar a su gobierno de «ocultar cifras».
«Simplemente es porque en el momento están dando un ejemplo de civismo. Hemos sido una Comunidad tan golpeada que hay una conciencia superior a la hora de utilizar las mascarillas«, ha argumentado.
Según ella, la mayor parte de los contagios se producen en el ámbito privado y la administración «no puede estar en todos los rincones con una cámara«, por lo que están haciendo una «gran pedagogía» para que los madrileños usen la mascarilla.
«Ahora mismo los resultados son muy positivos para Madrid pero no podemos relajarnos, por eso estamos preparando todos los escenarios con rastreadores y poniendo a las personas y sus contactos en cuarentena«, ha dicho.