España agota la paciencia de Bruselas. Este miércoles, la Comisión Europea ha dado un plazo máximo de dos semanas a Madrid para que José Luis Martínez Almeida, alcalde del PP en Madrid, tome medidas contra la contaminación.
Desde la moratoria de multas de Madrid Central impuesta por el popular, la Comisión Europea está muy preocupada por España. Tanto es así, que este 24 de julio -último día antes de las vacaciones- tienen encima de la mesa la decisión de si lleva a España al Tribunal de Justicia de la UE.
Bruselas abrió expediente a España en junio de 2015 por el exceso de dióxido de nitrógeno en Madrid y Barcelona. En 2017 lanzaron un ultimátum por el «incumplimiento constante», y varias advertencias más durante el 2018. Pero durante 2019 la Comisión prolongó los plazos porque el paquete de mejoras presentado por el Gobierno -que incluía Madrid Central- podrían servir.
Tras la cancelación de Madrid Central por Almeida, la Comisión se ha cansado y ha dado el ultimátum final mediante una carta al Gobierno de España para que tome más medidas que atajen los incumplimientos en cuanto al exceso de contaminación del aire.
«No me cabe la menor duda de que Madrid Central va a avanzar y no retroceder. La CE nos los recuerda. La OMS nos lo recuerda. Lo que es más importante: los ciudadanos nos lo recuerdan. No hay ningún responsable a ningún nivel que pueda mirar para otro lado cuando de lo que se trata es de salud pública y prestación de servicios de calidad», comentó el jueves pasado la ministra en funciones de Transición Ecológica, Teresa Ribera.
El documento comienza con «me gustaría llamarle la atención sobre la grave situación de la contaminación en España», y prosigue recordando que «las medidas tomadas y anunciadas no han sido suficientes para solventar las vulneraciones» de los valores de la directiva sobre Calidad del Aire.