Este lunes entró en vigor en Bruselas un toque de queda entre las 22.00 horas y las 06.00 horas para contener la expansión de la pandemia del coronavirus en la región, sumándose así a las restricciones fijadas el viernes por el Gobierno federal, por Valonia y por la Federación Valonia-Bruselas.
El gobierno de Bruselas ha anunciado que otorgarán un “certificado de no vivienda” para que las personas sin hogar puedan quedarse en la calle después de la hora límite y puedan seguir durmiendo a la intemperie.
«Los refugios no tienen la capacidad suficiente para albergarlos a todos. Sería un doble castigo multarlos porque no pudieron encontrar refugio en un centro. Para nosotros, el primer objetivo de la dispensación de estos certificados es protegerlos de una multa y asegurarnos de que no se les moleste cuando intenten encontrar un refugio improvisado en el exterior», ha dicho Christophe Thielens, portavoz de la organización de ayuda Samusocial.
El Gobierno bruselense ha informado que ya se han impreso 2.500 certificados que serán repartidos por trabajadores de campo, equipos móviles y efectivos de los servicios de emergencia de diferentes hospitales. Además, la policía local ha afirmado que se pondrá en marcha una política de tolerancia hacia las personas sin hogar.