Pablo Casado, líder del Partido Popular, se ha negado a a expulsar del partido a Jorge Fernández, imputado en la trama Kitchen, porque quiere evitar hacer de «justiciero» y repetir el «error» que Rajoy cometió al expulsar a Rita Barberá.
Aunque los estatutos del partido contemplan la suspensión de la militancia en casos de «delitos flagrantes de corrupción», Casado se niega a tomar medidas contra el implicado en el espionaje de Bárcenas en busca de encontrar los archivos que comprometían la caja B del PP.
Según fuentes de Génova han asegurado a El Confidencial Digital, Casado no expulsará a Fernández Díaz para «evitar el error de Rajoy con Rita Barberá», aún dirigentes del partido haciéndole presión para que lo expulse.
Casado ya aseguró públicamente que «caerá quien tenga que caer» pero que no él no será «justiciero», porque en su partido «están acostumbrados a los juicios paralelos y penas de telediario que luego quedan en nada».
