La Comisión Nacional de Sanidad de China ha confirmado 75 nuevos casos de COVID-19 durante las últimas 24 horas. Algo que ha sorprendido al mundo, ya que la pandemia parecía controlada en el país.
Ante este riesgo de cuarta ola en el país asiático, las autoridades chinas han decidido, además de aislar varias ciudades del norte del país, comenzar una nueva campaña de test más precisos: test anales para detectar COVID-19.
Tal y como han argumentado las autoridades pertinentes, esta prueba resulta más precisa ya que los rastros del virus que se encuentran en el ano pueden durar más que en el tracto respiratorio.
El test consiste en la introducción de un hisopo de algodón unos dos o tres centímetros empapado en solución salina en el ano durante varios segundos. Tras esto, los especialistas analizan la muestra para detectar rastros activos del virus.
Sin embargo, los hisopos anales no se utilizarán tanto como los de la nariz o garganta, ya que, dentro de la incomodidad generalizada, estos últimos son más prácticos que el anal. Pero sigue siendo una muy buena alternativa en algunos escenarios, como en las personas que estén en cuarentena.