China cierra sus fronteras ante un nuevo brote de coronavirus en Pekín. Las autoridades han informado de 44 nuevos casos de COVID-19, 11 de ellos venidos de fuera y 33 locales.
Así, China ha pasado a cerrar su espacio aéreo y suspender 1.255 vuelos en dos aeropuertos de Beijing, siendo esto casi el 70% de todos los viajes programados del país. Chen Bei ha anunciado a través de una conferencia televisada el cierre inmediato de todos los barrios declarados como alto y mediano riesgo, obligando a todos sus residentes a guardar cuarentena.
En total, se han aislado 29 comunidades residenciales, con un total de 90.000 personas viviendo en ellas. Estos barrios han sido rodeados de vallas para garantizar el aislamiento. Además, se han vuelto a cerrar todos los colegios de la capital china y se han limitado los transportes, tanto privados como públicos.
Hasta ahora, no se había detectado ningún caso de coronavirus en Pekín desde hacía dos meses y los ciudadanos se encontraban desescalando a la normalidad.