El suceso tuvo lugar el pasado mes de septiembre, en Bladel, Holanda. Los equipos de emergencia acuden a atender a una mujer que yacía en el suelo inconsciente con una herida en la cabeza, y se encuentran con que el perro de la mujer no deja que nadie se le acerque. El momento fue documentado en el siguiente vídeo:
Servicios de emergencia en Brabantse Bladen (Holanda) salvan a mujer que yacía inconsciente en el suelo. Su perro no quería dejarla, pero la policía pudo controlarlo sin dañarlo. La mujer fue llevada al hospital y el perro a la casa del esposo. ? pic.twitter.com/M7hOk7VRBx
— AnimaNaturalis (@AnimaNaturalis) 16 de enero de 2019
El animal, de gran tamaño y muy nervioso, no quiere dejar sola a su dueña ni que la toquen y se pone violento. El vídeo lo compartió en España la ONG Anima Naturalis en sus redes, y en el se puede ver cómo los equipos logran ir acercándose poco a poco, hasta que finalmente con un poco de comida logran tranquilizarlo y acaban por sujetarlo con una cuerda.
El tuit se viralizó con más de 7.000 retuits y 780.000 reproducciones en Facebook. Muchos usuarios de las redes lo compararon con el caso de Sota, el perro al que un guardia urbano asesinó a tiros en Barcelona después de que le mordiera el brazo:
Aqui se pega un tiro directamente y punto. Q envidia joé
— muñecacabrea (@6271ffb031d040b) 16 de enero de 2019
Una manera ejemplar y profesional de actuar de la policía, sin necesidad de hacer daño al perro de la mujer que era la que necesitaba ayuda. Es normal que su perro quisiera permanecer a su lado. Ojalá sirva de ejemplo para España, donde es necesario un protocolo de actuación.??
— partidocracia1 (@PartidocraciaR) 16 de enero de 2019
Oportunas imágenes sobre el protocolo adecuado para enfrentarse a un perro, sobretodo hoy que el Ayuntamiento de Barcelona informa que la actuación del policía urbano que mató a Sota fué “defensiva y proporcional” … pic.twitter.com/LIYiNDubNh
— mano_lareu (@ManoLareu) 16 de enero de 2019
es la diferencia entre un país civilizado y moderno y un país de garrulos, como por desgracia es el nuestro
— miguel angel muñoz m (@MSpartako) 16 de enero de 2019