Este jueves, los Mossos d’Esquadra desahuciaron tan solo una hora antes del toque queda a una familia con tres menores en Ciutat Meridiana, Barcelona. La mujer volvió del trabajo el mediodía de este jueves y encontró la cerradura cambiada, sin que le fuera notificado a ella ni a su abogado.
Ante esta situación, decidió volvió a entrar en el piso que habitaban desde hacía dos años, propiedad del BBVA, y sonó una alarma que habían instalado después del desahucio que se había ejecutado mientras ella estaba trabajando.
Los agentes de los Mossos se desplazaron hasta la vivienda, donde decenas de vecinos intentaron frenar el desahucio. La abogada y codirectora de IRIDIA (Centro para la Defensa de los Derechos Humanos), Anaïs Franquesa Griso, ha denunciado este incidente, considerando que «un desahucio de estas características, en plena pandemia, con toque de queda y sin tener los Mossos una orden judicial, es muy grave».