Las autoridades de Finlandia han detectado una nube radioactiva sobre el mar Báltico que está afectando a varios países del norte de Europa y que podría proceder de Chernóbil.
Noruega, Suecia y Holanda también han notificado esta radioactividad, que «indica daños de un elemento de combustible en una planta nuclear». Las autoridades de estos países han alertado de la detección de pequeñas cantidades de isótopos radioactivos no dañinos para los humanos en algunas zonas de Finlandia, el sur de Escandinavia y el Ártico.
22 /23 June 2020, RN #IMS station SEP63 #Sweden???????? detected 3isotopes; Cs-134, Cs-137 & Ru-103 associated w/Nuclear fission @ higher[ ] than usual levels (but not harmful for human health). The possible source region in the 72h preceding detection is shown in orange on the map. pic.twitter.com/ZeGsJa21TN
— Lassina Zerbo (@SinaZerbo) June 26, 2020
La directora de la Autoridad de Seguridad Nuclear y Radiación de Finlandia, Pia Vesterbacka, ha afirmado en declaraciones a la televisión pública que no hay razones para alarmarse, dado que el material radiactivo detectado es demasiado pequeño para suponer un riesgo para la salud.
«La cantidad de partículas radioactivas es muy pequeña y no tiene impacto en el medio ambiente o la salud humana», explicó en declaraciones a la mencionada televisión pública del país. La experta señaló que esta pequeña nube contaminante podría proceder del desastre nuclear sucedido en Chernóbil en 1986.
«La radiación del desastre de Chernóbil todavía está circulando. Estas lecturas son solo ligeramente elevadas en relación con el telón de fondo radioactivo regular», añadió Vesterbacka.
Por su parte, Rusia ha manifestado mediante su agencia de noticias oficial TASS que las dos plantas nucleares del noroeste del país no han reportado ninguna incidencia, citando a un portavoz del operador nacional ruso Rosenergoatom. Las plantas de Leningrado, cerca de San Petersburgo, y de Kola, cerca de Murmansk, «operan con normalidad, con niveles de radiación dentro de la norma».