Aprobar una Ley de Juego similar a la del tabaco para acabar con el preocupante alza de las casas de apuestas. Este es uno de los objetivos prioritarios del equipo de Unidas Podemos que dirigirá Alberto Garzón en su nuevo Ministerio de Consumo.
Será uno de los primeros reales decretos que se llevarán al consejo de ministros, y el grupo morado ha asegurado estar trabajando desde el martes en ello. El proyecto se apoya en una medida que Unidas Podemos ya llevó por primera vez en su programa electoral a la Comunidad de Madrid en las autonómicas pasadas.
La futura ley tiene como objetivo prohibir que los locales de apuestas puedan abrir antes de las 22 horas y que se instalen cerca de centros educativos. El grupo tiene bastante claro el objetivo de esta medida: «No puedes apostar mientras te tomas el café con churros, en los 30 minutos del recreo o pasar el fin de semana en el local porque la cerveza es barata. Si quieres apostar, que no te vean y que se haga cuando los menores estén en la cama», explican fuentes de Podemos al diario lainformación.com. Aún así, explican que será complicado implementar este punto, ya que se trata de una competencia transferida y deberán ser las comunidades las que establezcan límites horarios a estos locales.
Otro aspecto prioritario del proyecto de ley es el restringir la publicidad de los operadores a niveles similares a los de las marcas de tabaco. De esta forma no podrían anunciarse en eventos deportivos, y daría camino a que, por ejemplo, las marcas no pudieran anunciarse en las camisetas de los equipos o a que jugadores famosos como Cristiano Ronaldo, Neymar o Piqué no pudieran ser la imagen publicitaria de estas casas de apuestas.
Desde Unidas Podemos aclaran que son conscientes de que se enfrentarán a las multinacionales del juego, que cuentan con «mucho poder» y posibilidad de ejercer presión. Es, sin lugar a dudas, uno de los mayores retos del nuevo Ministerio de Consumo, que está asegurado en la negociación con el PSOE donde el grupo morado pactó la regularización de forma «urgente» de los juegos de azar «para prevenir y frenar la ludopatía».