El pleno del Ayuntamiento de Madrid ha aprobado este martes la remunicipalización de las escuelas de tauromaquia, con lo que ahora el Área de Cultura, Turismo y Deporte, liderado por la concejala del PP Andrea Levy, gestionará directamente este centro, que durante años ha sido beneficiario de subvenciones públicas significativas.
La votación ha contado con el apoyo de PP, Vox y Ciudadanos, la abstención del PSOE y la oposición de Más Madrid.
Esta remunicipalización responde al interés de las derechas de rescatar a un sector en decadencia debido a la pandemia de coronavirus y es una medida enmarcada en los acuerdos entre el Ayuntamiento y la Comunidad de Madrid, con la que el Consistorio, además de asumir la gestión directa, unifica las escuelas de la capital y la que la Comunidad tenía en La Venta de Batán, donde se situará el centro educativo de tauromaquia.
La concejala de Más Madrid Amanda Romero ha expresado sus sospechas de que esta remunicipalización tendrá consecuencias económicas para la región, teniendo en cuenta que La Venta del Batán requiere una remodelación para poder asumir la unificación de todas las escuelas taurinas.
De hecho, el Ayuntamiento ya concedió una subvención de 664.707 euros a la empresa Madrid Destino, encargada de la gestión del centro de la Casa de Campo, para realizar las obras que permitieran unificar las escuelas; unas reformas que no se han llevado a cabo, por lo que la empresa tendrá que devolver unos 400.000 euros de ayudas públicas.
«Desde nuestro punto de vista la jugada va por ahí. El Ayuntamiento asume los gastos de todas las escuelas y le quita una gran carga a la Comunidad de Madrid, realiza las obras de reacondicionamiento y, después, hacen una concesión para la gestión del centro a quien ellos consideren. Estamos seguros de que es lo que va a terminar pasando. Es una medida ruinosa para la ciudad, peligrosa para los menores y cruel para los animales«, apunta Romero.
