Aprovechando el altavoz del discurso de graduación, dos alumnos de la Universidad de Sevilla, Jesús Aguado y Yeray Pascual, expresaron su descontento con la universidad y con los profesores.
Aguado comienza el discurso avisando: «Este discurso quizás no sea lo que la gente quiere oír en una circunstancia como esta», y asegura que el descontento es generalizado: «He preguntado a muchos de mis compañeros y compañeras si volverían a estudiar física aquí. Una de las respuestas más frecuentes era ‘Sí, pero en Sevilla no‘». El alumno continúa manifestando su frustración por lo que cree que ha sido un desaprovechamiento de la pasión que los alumnos sienten por la física.
Gran parte de las críticas iban dirigidas a los profesores, muchos de los cuales, dicen «van a enseñar sin amor y sin pasión por lo que hacen». Pascual lamenta lo difícil que se pueden hacer determinadas asignaturas por culpa de profesores «que no se toman la enseñanza tan en serio», y les recuerda que depende de ellos y de su entusiasmo que su paso por la universidad sea «alucinante o un purgatorio«. Aunque también agradecen a otros profesores que «sí aman la enseñanza. Profesores que se implican, no solo en un aspecto académico, sino también en un aspecto humano».
Critican, además, otras situaciones que han vivido en la universidad, por ejemplo, la «entrega de notas de evaluación continua 24 horas antes de un examen, asignaturas que sobrepasan todo límite humano de horas de dedicación, y una tasa de fracaso que supera el 50%«.
El vídeo se subió a Youtube en julio, pero no ha sido hasta ahora que se ha hecho viral. Las palabras de Yeray Pascual y Jesús Aguado, al fin y al cabo, recogen el malestar y el descontento que sienten otros miles de alumnos universitarios de todo España.
