José Manuel Calvente, exabogado de Podemos cuyas declaraciones basadas en rumores y comentarios sin fuentes han iniciado una investigación sobre las presuntas irregularidades del partido se ha hecho un lío ante el juez respecto a los sobresueldos que acusa a varios miembros del partido de cobrar.
Calvente afirma que ningún cargo político habría cobrado esos sobresueldos, sino que habrían sido tres empleados: la gerente, Rocío del Val, el tesorero, Daniel de Frutos, y una abogada. Estos se habrían subido el sueldo en 2019 mediante la aplicación de un complemento salarial de responsabilidad personal, de 210,32 euros mensuales, y otro de coordinación ejecutiva, de unos 400.
Sin embargo, su versión empieza a hacer aguas cuando el abogado de Podemos aporta dos nóminas del anterior gerente y una del propio Calvente en las que, ya en 2018, aparecía ese extra por «responsabilidad personal».
«Está usted hablando de 2018 y yo le hablo de 2019«, fue la respuesta de Calvente al letrado.
«¿Por qué lo cobraba usted y considera sin embargo que sea improcedente que lo estén cobrando la gerente y el secretario de Finanzas?», le cuestionó el juez instructor del caso, Juan José Escalonilla.
Viéndose acorralado, el denunciante cambió la versión y alegó que el complemento de responsabilidad personal no era un sobresueldo sino un simple plus salarial: «Hay otros complementos, como el de coordinación ejecutiva, que no están regulados. El mío sí estaba regulado. Yo le hablo de los que no están regulados. El de coordinación ejecutiva no es compatible», dijo.
Calvente no responde a la pregunta de si tenía autorización o no la gerente para aplicar esos pluses a los tres empleados, dando a entender que lo desconoce. ¿Qué denuncia entonces?
