Los nietos de Juan Carlos I están siendo muy observados por la población y la prensa a raíz de los escándalos financieros que salpican a algunos de ellos. Tras los enfados de Victoria Federica con los periodistas tras ser cuestionada por esta cuestión, le ha tocado a Pablo, uno de los hijos de la infanta Cristina e Iñaki Urdangarin, lidiar con esto.
Preguntado por los escándalos de su abuelo, Pablo primero se tapó el rostro y se negó a decir nada: «Que no, que no, no voy a responder a nada, no hace falta que me sigas».
No obstante, ante la insistencia del reportero, el joven estalló: «Déjame en paz, pesado».