El hombre que asesinó a su hija de cuatro años delante de su madre en su domicilio en Zaragoza no se muestra arrepentido y afirma que la niña era la reencarnación de su madre (la abuela de la menor), quien le había pedido que se la enviara. Según el padre, la niña está ahora «feliz con Dios».
El asesino permaneció toda la noche del martes en el Hospital Provincial, ya que al parecer pudo haber cometido el homicidio durante un brote psicótico. Todo parece apuntar a que el hombre será enviado a prisión. No obstante, será el informe forense el que establezca las condiciones.
El hombre, de 34 años y nacionalidad nigeriana, fue detenido la noche del pasado lunes en Zaragoza tras matar a su hija de cuatro años de un corte en el cuello realizado con una navaja. Los hechos ocurrieron cerca de las 23.00 horas del lunes en el barrio de Delicias de la capital aragonesa.
La Policía Nacional acudió a la vivienda tras recibir un aviso, donde hallaron a la niña aún con vida pero desangrándose en los brazos de su madre, de 27 años, que se encontraba en estado de shock. El asesino había huido y la menor fue trasladada de urgencia al hospital Materno Infantil, donde terminó falleciendo poco después.