La derrota de Donald Trump en su último intento por legitimar una vez más las elecciones se resume en una frase: «La solicitud de medidas cautelares presentadas al juez Alito y referida por él a la Corte ha sido rechazada».
La demanda fue presentada por el republicano Mike Kelly, y pedía la anulación de 2,5 millones de votos enviados por correo en Pensilvania bajo la acusación de ser fraudulentos.. «En el momento en que esta acción se presentó, el 21 de noviembre del 2020, millones de votantes de Pensilvania habían expresado su voluntad tanto en las primarias de junio como en las elecciones generales de noviembre», alegaron los jueces, criticando la tardía presentación del recurso y su pretensión de «inhabilitar» a millones de ciudadnos.
En el recurso de Trump, se alegaba que se estaban violanod sus derechos. El Tribunal Supremo lo ha rechazado por unanimidad ya que no consta ningún voto contrario y, de hecho, ni siquiera han tenido la necesidad de elaborar un argumento.