El Gobierno de España ha decidido, junto a Portugal, suspender los vuelos de entrada procedentes del Reino Unido a partir de este martes 22 de diciembre excepto para ciudadanos españoles o residentes. Esta medida llega como respuesta a la crisis ocasionada por el aumento masivo de contagios y la detección de una nueva cepa del virus, que podría ser hasta un 70% más contagiosa.
El Ejecutivo ha tomado esta decisión tras la reunión del mecanismo de crisis de la Unión Europea celebrada esta mañana, en la que varios países, entre ellos España, habían reclamado medidas coordinadas respecto a los vuelos procedentes de Gran Bretaña.
Países como Bélgica, Italia, Portugal, Alemania, Austria, Polonia o Países Bajos ya habían implementado esta medida tras el anuncio del cierre en Londres realizado por el primer ministro Boris Johnson.
Hasta este momento, la condición para que los viajeros procedentes de Reino Unido pudiesen entrar a España por vía aérea era que tuviesen una prueba PCR negativa realizada hasta 72 horas antes de la llegada. Desde este martes solo podrán acceder a nuestro país los ciudadanos españoles o residentes procedentes de Reino Unido que lleven consigo una PCR negativa.