En estas preelecciones, VOX está centrando su poder en la provincia de Cáceres, donde consiguió representación el pasado 26 de abril bajo la candidatura de Víctor Sánchez del Real.
Por ello, el partido ultraderechista mandó a Iván Espinosa de los Monteros a la capital cacereña por segunda vez en veinte días para celebrar un mitin en el mismo lugar, el Hotel Extremadura, que Abascal llenó en el mes de octubre.
Allí, acompañado por la cabeza de lista de VOX en la ciudad, Magdalena Nevado, se dirigió a las 300 personas que acudieron al acto asegurando que tiene el «pálpito» de que «aquí huele a diputada», refiriéndose a que el partido podría quitarle el puesto a Ciudadanos el próximo 10-N.
Tras eso, afirmó que le gustaba venir a Cáceres, y que acude a la ciudad «más rápido que una feminista a por una subvención». «Nos hemos conocido hace seis semanas y he venido tres veces por aquí porque en cuanto a conocí a Magdalena dije aquí hay madera y talento y se preocupa por sus vecinos y tiene visión de lo que hay que hacer porque tiene altura de miras, equipo y fuerza», aseguró el ultra.
