La organización Personas por el Trato Ético a los Animales (PETA) ha difundido un duro vídeo que muestra la crueldad que sufren las alpacas en las instalaciones de Mallkini, la granja privada más grande del mundo. Esta compañía, ubicada en Muñani (Perú), es la más importante dentro del mercado de lana de alpacas y es propiedad del grupo Michell, primer exportador mundial de fibra de este mamífero.
En las imágenes, grabadas en noviembre de 2019 por un miembro encubierto de PETA, se puede ver a las alpacas siendo tratadas de manera violenta por los empleados, que las inmovilizan en posiciones antinaturales. Las alpacas gritan y vomitan de dolor mientras los trabajadores las cosen sin siquiera proporcionarles analgésicos.
Tras la difusión del vídeo, el grupo Michell ha emitido dos comunicados en los que asegura no tener conocimiento de estas malas prácticas y reitera que posee certificaciones que deberían verificar el cumplimiento de buenas prácticas de manejo animal. «Estamos optimizando la capacitación de nuestros operarios y mejorando nuestros sistemas de control a fin de garantizar que un hecho claramente aislado como este no vuelva a suceder nunca más», han dicho desde la compañía.
«Se ha comprobado en varias ocasiones que cuando se usan animales para la producción en masa, siempre hay crueldad involucrada. Donde sea que los humanos tengan incentivos para ganar dinero a costa de los animales, harán recortes para economizar y los animales son los que pagarán el mayor precio», ha dicho Yvonne Tylor, directora de proyectos corporativos de PETA.
La organización animalista ha pedido a las personas que quieran acabar con el sufrimiento de estos animales que comprueben la etiqueta antes de comprar una prenda, y en caso de que aparezca la palabra «alpaca», no la adquieran.
