Alberto Pozas Fernández, último director de la revista ‘Interviú’ y responsable de Información Nacional en la Moncloa hasta hace apenas una semana, confesó este mismo lunes ante el juez haber entregado a Villarejo la información obtenida del móvil robado a Podemos.
La transacción se llevó a cabo después de que el dispositivo móvil llegara a su redacción. Así lo aseguró Pozas, quien estaba en principio citado a declarar como testigo, pero tras la confesión el juez tuvo que interrumpir la sesión para anunciar que seguiría en otra fecha acudiendo ya como investigado con un abogado propio.
Según las declaraciones de la pareja de Dina Bousselham, dirigente de Podemos en la Comunidad de Madrid de quien sustrajeron el teléfono, el aparato se lo robaron a la política del bolsillo de su chaqueta cuando ambos se encontraban en el Ikea de Alcorcón, aunque de momento no se sabe cómo llegó a las oficinas de Interviú.
En la memoria sustraída del dispositivo móvil se podía encontrar abundante documentación sobre el funcionamiento ordinario de Podemos y conversaciones privadas con otros altos cargos del partido y fotografías comprometedoras de índole personal.
