Tres trabajadores del Institut Català de la Salut (ICS) han sido expedientados y suspendidos de empleo por ofrecer a familiares directos ser vacunados contra la Covid. Los hechos tuvieron lugar durante una campaña de vacunación en un centro para personas con discapacidad situado en Terres de l’Ebre.
El director del ICS y secretario de Salut Pública, Josep Maria Argimon, ha descrito el incidente como «muy grave” y ha anunciado que “será sancionado en su justa medida”.
En la rueda de prensa del balance de la vacunación contra el coronavirus realizada con la subdirectora general de Promoció de la Salut, Carmen Cabezas, Argimon no ha aclarado si los profesionales sanitarios llegaron a vacunar a sus familiares y, en ese caso, a cuántas personas se vacunó.
En un primer momento, Argimon hizo referencia a los sancionados como un grupo de enfermeras, pero luego rectificó y se refirió a ellos como «empleados del ICS».
“Parece ser que invitaron a vacunarse a familiares directos de estas personas. Hemos abierto un expediente y los hemos apartado de su puesto de trabajo. Son personas que trabajan en el ICS”, ha explicado.
Si estas personas hubieran sido vacunadas, el secretari de Salut Pública ha confirmado que estas personas recibirían la segunda dosis en los plazos establecidos. “No perderíamos ahora cinco dosis. O seis o siete, las que sean”, ha recalcado.
