Francisco Serrano, líder de Vox en Andalucía, ha solicitado una baja médica tras la polémica suscitada por sus comentarios en Twitter lamentándose por la sentencia de La Manada.
A través de un comunicado, Serrano ha informado de que se encuentra «de baja médica» para recuperarse anímicamente junto a su familia, «que ha vuelto a sufrir las consecuencias del linchamiento en prensa y redes sociales».
El dirigente de ultraderecha, no obstante, no se retracta de sus afirmaciones: continúa defendiendo el análisis «objetivo y jurídicamente riguroso» que según él realizó por Twitter de la sentencia de los violadores de La Manada.
Respecto al mensaje emitido en su cuenta de Facebook, echa balones fuera y lo achaca a un «colaborador»: pidió a un «nuevo colaborador que lo publicara también en Facebook, lo cual derivó en una publicación completamente ajena a mí y manifiestamente incorrecta en las formas«.
Este mensaje afirmaba que la sentencia del Tribunal Supremo había sido «dictada por la turba feminista supremacista», así como que «si una mujer dice sí pero en cualquier momento posterior dice no, inclusive varios días después, el denunciado será condenado a prisión por violación. Hasta un gatillazo o no haber estado a la altura de lo esperado por la mujer, podría terminar con el impotente en prisión».
«En relación a la publicación en mi página de Facebook donde se hizo una vergonzosa apología de la prostitución y otras gruesas expresiones, a estas alturas creo que es evidente para todos quienes me conocen, que en absoluto son expresiones mías porque no responden a mi estilo de escribir, de pensar, ni de hablar en público, ni tampoco en privado», ha aclarado Serrano.
Concluye atacando a un «sector de la prensa» que ha proferido contra él «una batería de insultos y descalificativos jamás visto en España» y que no se «merece en absoluto, seguramente dirá que todo esto es un montaje, para así persistir en la mentira y la manipulación contra mi persona».