Hungría ha aprobado este martes una polémica reforma de su Constitución que prohíbe expresamente a las personas LGTB la adopción. El texto de la enmienda, decidida por mayoría parlamentaria, establece que «la madre es mujer y el padre es varón» y que Hungría asegura el desarrollo del menor según su «identidad de género».
Esta reforma es una más de las normas restrictivas hacia la población LGTB en uno de los gobiernos europeos más conservadores. Cabe recordar que en 2011 Hungría prohibió los matrimonios entre personas del mismo género al incluir en su Carga Magna un texto que sostiene que el matrimonio es la unión entre un hombre y una mujer.
La nueva modificación ha sido aprobada en el Parlamento con los votos a favor del Fidesz (143), el partido del primer ministro Viktor Orbán, 45 en contra y cinco abstenciones. Los diputados del partido opositor Coalición Democrática no participaron en la votación, tal y como habían avisado previamente, por afirmar que el texto propuesto es «excluyente».
Además de esta enmienda constitucional, el Parlamento ha aprobado otro texto legal que establece que solo los matrimonios pueden adoptar.
