Una de las noticias más sonadas de esta semana ha sido saber que Pablo Iglesias e Irene Montero, líderes de la formación Podemos, se mudan a las afueras de Madrid, a la sierra de Galapagar. Lo más impactante es saber que se mudan a una finca gigantesca, a una casa valorada en más de 600,000 euros, con jardín, piscina, materiales caros, con toda clase de lujos.
Esto ha despertado muchas críticas y opiniones, tanto de derechas como de izquierdas, pues la noticia, aún sin saber mucho más, es sorprendente.
Una casa muy lujosa, con piscina irregular, amplio jardín, ubicada en una zona privilegiada e incluso «habitaciones para empleados domésticos», una opulencia cuanto menos radicalmente diferente al estilo habitual de Podemos.
El líder de la formación morada y la portavoz del congreso han salido al paso ante las críticas defendiendo que a los cargos públicos hay que criticarles por sus políticas o «corrupción» y no por gastar su dinero en lo que quieran «de forma honrada«.
Aquí tenemos las declaraciones que han hecho la pareja en Facebook, donde explican que se han hipotecado para pagar su casa y que pagarán unos 800 euros al mes cada uno durante unos 30 años:
https://www.facebook.com/IglesiasTurrionPablo/posts/2001710489901347
De todos modos, resulta todo muy confuso. Si bien se trata de solo una casa, y aún habiéndola adquirido de manera honrada, Pablo Iglesias siempre ha defendido el estar «al mismo nivel que el pueblo» y no vivir alejado de la problemática diaria. Irse a vivir a la sierra, a un casoplón, sin duda lo distancia y aisla del pueblo al que dice representar.
Recordemos algunas declaraciones anteriores de Pablo Iglesias:
¿Entregarías la política económica del país a quien se gasta 600.000€ en un ático de lujo? http://t.co/4EhKia0d vía @el_plural
— Pablo Iglesias 🔻{R} (@PabloIglesias) August 20, 2012
En el minuto 1:20: «Prefiero mi casa en Vallecas a la Moncola»
Aún con todo, en las declaraciones que han hecho sobre el tema concluyen que se les criticará pase lo que pase, y que por cosas como esa prefieren vivir más lejos de la ciudad:
«Asumimos que con nosotros funcionan reglas diferentes que con los demás. Sabemos por qué es. También por eso queremos vivir más cerca del campo. Sabemos que nos criticarán hagamos lo que hagamos. Nosotros seguiremos haciendo nuestro trabajo lo mejor que sabemos y construyendo un proyecto de vida que nos hace felices»
¿Qué opináis sobre el tema?
Por curiosidad, podéis ver más fotos de la nueva residencia de los líderes de Podemos haciendo click en este enlace.