Durante la emisión del programa de la TVE «La hora de la 1» la periodista y presentadora Silvia Intxaurrondo puso contra las cuerdas al juez García Castellón al cuestionar su decisión de procesar a Francisco Granados y a otras 42 personas por corrupción, pero no a la expresidenta madrileña Esperanza Aguirre. Este contraste ha generado un fuerte debate sobre la imparcialidad y motivaciones del sistema judicial español.
Intxaurrondo señaló la aparente inconsistencia en las actuaciones judiciales, recogiendo las criticas que sugieren que figuras políticas de alto perfil parecen estar protegidas, mientras otros enfrentan consecuencias legales. Esta crítica pone en relieve la necesidad de transparencia y justicia en todos los niveles de la política española.