El alcalde de Zamora, Francisco Guarido (Izquierda Unida), tuvo que escuchar el pasado martes cómo le insultaban, cuando se estaba despidiendo en un pleno junto a sus concejales. Su respuesta ha recibido el aplauso de las redes.
«¡Qué gilipollas es!», exclamó alguien en la videollamada justo antes de cerrar el directo.
Guarido ha querido pronunciarse al respecto de forma directa pero elegante, cualidad de la que carece la persona que le insultó.
— Paco Guarido (@PacoGuarido) May 13, 2020
«Yo no le doy más importancia, ya que le podía haber pasado a cualquiera. Dicho lo cual, hay que observar que el pleno no es una taberna; o, dicho de otra manera, ella puede pensar de mí que soy un gilipollas, no se lo reprocho, pero el comentario se hace fuera de las instituciones y con los compadres. El insulto se coló por descuido y eso se arregla de manera elegante: se da un paso al frente y se dice «he sido yo, lo siento no volverá a ocurrir», afirma el regidor.
No obstante, quiere aclarar que «una cosa es no escandalizarse por lo ocurrido, y otra es echar tierra y olvidarse. Cuando uno habla (o alguien que está con él) se enciende el marco del cuadro de la imagen. Solo hay que ver que marco encendido. Verde y en botella».
Me gusta lo serio y directo que eres. Ese es el camino.-
— Agustin de la Peña (@aguspg365) May 13, 2020
Has demostrado la elegancia q ella no ha tenido
— Borboleta (@Borbole06688666) May 13, 2020