La Asociación de Empresas de Equipos de Protección Individual (ASEPAL) ha determinado que ha detectado una veintena de fallos o errores en el cumplimiento con la normativa aplicable en las mascarillas repartidas en Madrid a los ciudadanos a través de las farmacias.
Al analizar estas mascarillas, la asociación ha detectado que no se adjuntan instrucciones de limpieza, revisión y desinfección. Tan solo se proporciona una indicación de que deben almacenarse a temperatura ambiente en un lugar ventilado, y otra sobre la colocación de la mascarilla.
Además, la ASEPAL señala que no se proporciona información relativa a las clases de protección apropiadas para los diferentes niveles de riesgo y límites de uso correspondientes y no se especifica el embalaje correcto para su transporte. Tampoco existen indicaciones acerca de dónde debe guardarse la mascarilla cuando no se esté utilizando a lo largo de las 48 horas de uso declarado.
La asociación asegura que tampoco se aclara el significado de los mercados incluidos en el EPI, no se identifica el riesgo del que el EPI debe proteger y no hay ninguna referencia al Reglamento (UE) 2016/425. Tampoco está el nombre, dirección y número de identificación del organismo que ha realizado los procedimientos de evaluación de la conformidad citados anteriormente.
En el envoltorio no se especifica ninguna dirección URL en la que pueda consultarse la declaración UE de conformidad, que tampoco se entrega junto con el EPI. Otro de los fallos es que el sello CE no va acompañado de los cuatro dígitos de identificación del organismo notificado que haya realizado el procedimiento previsto en los anexos VII u VIII del Reglamento (UE) 2016/425.