Los influencers, dedicados a hacer publicidad con marcas probando sus productos a cambio de una retribución más los productos gratis, no se acaban de enterar que estamos en mitad de una pandemia mundial y, por tanto, una crisis económica creciente.
Las campañas entre compañías e influencers son acuerdos de mutua colaboración a los que llegan las partes, pero si son los influencers los que piden cenar gratis en un bar a cambio de visibilidad, es simplemente de tener la jeta muy larga.
Esto les sucedió a los encargados del Topik Restaurant de Barcelona, un local de cocina mediterránea con un toque japonés al que le llegó una oferta muy indignante por parte de dos influencers.
«Somos influencers de gastronomía con más de 22.000 seguidores y con un promedio de 1000 likes por foto», comienza la misiva, para pasar directamente al ajo: «Hemos pensado en hacer publicidad en nuestro perfil, subiendo un post con fotos y diferentes stories y un artículo en nuestro blog. A cambio, nos invita a comer vuestros mejores platos».
El restaurante, ante esta indignante situación, estalló: «Estamos perdiendo dinero día a día, con aforo del 30% y sin poder trabajar las noches bien, y vosotros me pedís que os invite a comer mis mejores platos. Lo que os tendríais que poner a trabajar de una…. vez», tuiteó el restaurante. «Mi abuela a esto le decía hacer el gandul».
Un poco de porfavor no?estamos perdiendo dinero día a día , con aforo del 30% y sin poder trabajar las noches bien y vosotros me pedís que os invite a comer mis mejores platos.
Lo que os tendríais que poner a trabajar de una…. vez.
Mi abuela a esto le decía hacer el gandul. pic.twitter.com/vAee1UfgXq— Topik Restaurant (@topikrestaurant) November 27, 2020