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La contundente reacción de un autobusero cuando los viajeros no ayudaron a un hombre en silla de ruedas

Falta de solidaridad en el transporte público

En París, un hombre en silla de ruedas estaba teniendo dificultades para subirse a un autobús y, contrariamente a lo que las nociones de la educación y la solidaridad dictan, ninguno de los pasajeros hizo nada por ayudarle. Lo curioso del asunto fue la respuesta del conductor: «¡Final de trayecto! ¡Todo el mundo abajo!».

El autobusero no dudó en echar del vehículo a todos los viajeros, indignado ante la pasividad y la falta de empatía. La acción de este tenía como fin facilitar la entrada del hombre con movilidad reducida.

Escrito por M. Zafra

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