La Generalitat de Catalunya ha pedido a sus casi 5 millones de vecinos de Barcelona y otros 12 municipios de su área metropolitana no salir de casa salvo lo imprescindible y que no acudan a sus segundas residencias ante el incremento de transmisión comunitaria del virus.
La petición va dirigida a los habitantes de Barcelona, L’Hospitalet, Viladecans, El Prat de Llobregat, Cornellà, Sant Boi de Llobregat. Esplugues de Llobregat, Montcada i Reixac, Badalona, Sant Joan Despí, Sant Just Desvern, Santa Coloma de Gramenet y Sant Adrià del Besòs.
En estos municipios se suspende la apertura al público de teatros y cine, actividades en los gimnasios y los establecimientos de ocio nocturno, como salas de fiesta y discotecas, también los acontecimientos deportivos en espacios cerrados.
En los bares y restaurantes se limitará el aforo en el interior de los establecimientos al 50%. En las terrazas, el aforo será el que resulte tras aplicar una distancia de dos metros entre mesas o grupos de mesas. Además, los restaurantes que puedan deberán promover el envío a domicilio o pedidos para llevar.
«Hacemos un llamamiento a todos los que han relajado las medidas de prevención: si la evolución actual de la pandemia se mantiene pronto tendremos que tomar decisiones más drásticas pronto», anunció Meritzell Budó, Presidència y portavoz. «Es la última oportunidad para Barcelona y su área metropolitana», agregó.
«Recomendamos a la gente que no se mueva si no es imprescindible», pidió Alba Vergés, consellera de Salud, advirtiendo de que las recomendaciones de este viernes son «el paso previo a tener que hacer un confinamiento total en casa si no bajamos la actividad social». «Hay que dejar de socializar», agregó.