La Iglesia gasta cerca de cinco millones de euros al año en publicitar su casilla del IRPF, más del doble de lo que destina a pagar los sueldos de los obispos.
Los datos en materia económica de la Conferencia Episcopal Española (CEE) han sido publicados en la memoria de actividades de 2018, remitida al Gobierno la semana pasada. Esta informe es avalado por la auditora internacional PwC, que constata que el documento ha sido preparado «adecuadamente y de manera fiable».
En su escrito, la CEE asegura que «quiere ofrecer a la sociedad su verdadero rostro, dando a conocer su forma de organización, su estructura, su financiación y las actividades que desarrolla en el marco de sus fines propios: la evangelización, la vivencia de la fe y el ejercicio de la caridad».
Así, se informa de que en 2018 recibió 285.115.796 euros en el marco de la campaña de la renta, «la cifra más alta desde el comienzo de la asignación tributaria». «En 2018 los españoles colaboraron con la financiación de la Iglesia con 17.067.791 euros más que el año anterior, lo que supone un incremento del 6,37%», recalca.
