La Conferencia Episcopal Española (CEE) ha solicitado a sus fieles que hagan donaciones durante esta pandemia porque «no viven del aire» y tienen que «pagar el sueldo al cura». La Iglesia recaudó el año pasado un total de 284,4 millones de euros con el 0,7% del IRPF, alcanzando un record histórico.
«La principal fuente de financiación de las parroquias tienen que ser las aportaciones de los fieles. Los fieles tienen que pagar el sueldo al cura y tienen que pagar las instalaciones, tienen que colaborar con su esfuerzo y también económicamente. Esa cultura la tenemos que plantear», ha afirmado Fernando Giménez Barriocanal, vicesecretario para Asuntos Económicos de la CEE, durante una rueda de prensa telemática.
Según las estimaciones de la CEE, antes del brote de coronavirus, la Iglesia recaudaba al mes alrededor de 20 millones de euros de las colectas. No obstante, desde el decreto del estado de alarma, se prohibieron las misas con público y no se han podido recoger las donaciones físicas.
Según Europa Press, la Iglesia ha recibido 1,6 millones de euros de aportaciones online. Los religiosos perciben estas donaciones sin comunicar a Hacienda. «Hay personas que no quieren realizar la desgravación de su donativo y por tanto no comunican sus datos a la Iglesia», argumentan.
El vicesecretario de Asuntos Económicos de la CEE ha explicado que los feligreses están «cayendo en la cuenta de que la Iglesia no vive del aire» y comprenden que es necesario donar para «el mantenimiento de los espacios» o «el sueldo del cura».
Así, ha solicitado a los seguidores que más allá de las donaciones puntuales, se «comprometan» a donar una cantidad periódicamente a su parroquia, tal y como pagan una suscripción a plataformas de televisión o de música.
