El Ministerio de Interior ha comenzado este mismo mes a levantar las nuevas vallas que delimitarán a Ceuta y Melilla. El contrato fue adjudicado a la empresa Tragsa por 17 millones de euros, y son un metro más altas que el polémico muro de Donald Trump.
En total, las nuevas vallas alcanzan una altura de 10 metros y en la cúspide presentan un rodillo de medio metro que sustituye las vigas circulares antiguas. Fuentes de la operación han adelantado a El Confidencial que es la primera vez que se usan barreras tan altas en esta frontera y apuntan al hecho de que sobrepasan la altura del criticado muro de Trump, que mide 9,1 metros.
La estructura está hecha completamente de acero y tiene una anchura de 2,5 metros. La mitad superior de la valla está formado por una parte enrejada. Al principio, el rodillo superior iba a ser giratorio, pero finalmente se descartó y se dejaron fijos.
Esta obra cuesta 8 millones a Ceuta y 9 a Melilla, y por culpa del coronavirus se retrasó aunque desde Interior aseguran que se acabarán en los diez meses acordados. También se renovarán los sensores de movimiento antiguos por unos más precisos, se instalará fibra óptica y un circuito cerrado de televisión que incluyen 66 cámaras, 14 de ellas térmicas.