La semana pasada, una vecina del exclusivo barrio madrileño de La Moraleja enfadó a medio país al afirmar que «no se mezclan con la gente de Alcobendas, que viven en pisos y van en autobuses…».
Este miércoles, la mujer ha reaparecido para intentar defenderse de las críticas que le han llovido por todas partes.
«No fue mi intención ofender ni menospreciar a nadie. Utilicé un verbo que no era el apropiado«, ha afirmado, refiriéndose a la palabra «mezclar». «Simplemente me refería a que en esta situación excepcional no nos movemos de nuestra zona, intentamos estar donde vivimos. Nada más…».
«Soy una persona normal y trabajadora, no soy ninguna ricachona. No vivo en ningún chaletazo enorme con terreno. Trabajo con mi marido desde los 23 años. Tengo tres hijas y somos una familia completamente normal», ha dicho. «No gano mogollón de dinero como se ha podido presentar. Han estado criticándome sin saber nada de mi vida ni saber quién soy y de esa manera tan ruin… Solo hice un favor a la periodista que me entrevistó».
Eso sí, se ha apresurado a lanzar pullas a políticos de izquierda como Pablo Echenique y Juan Carlos Monedero.
«Soy una persona que jamás me meto con nadie, aunque no me gusten cosas que hagan ellos mismos. Como que Echenique no haya pagado la Seguridad Social a su trabajadora, y yo sí que la pago religiosamente; o que Monedero no hace más que agitar manifestaciones en barrios humildes y a la hora de comer se va al Barrio de Salamanca. No entiendo esa mentalidad de progre«.
Cabe resaltar que Monedero no fue a comer a un restaurante de lujo tras acudir a la manifestación: se trata de un bulo de la ultraderecha.