Este sábado se cumplen cuatro años de las detenciones de ocho jóvenes a raíz de una pelea de bar en Altsasu en la que estuvieron involucrados dos guardias civiles fuera de servicio.
En junio de 2018, la Audiencia Nacional condenó a ocho personas a entre dos y 13 años de cárcel por delitos de atentado a agentes de la autoridad, lesiones, desórdenes públicos y amenazas, aunque no consideró presente el delito de «terrorismo» que pedía la Fiscalía y que tanta indignación causó. En octubre de 2019 el Supremo redujo las condenas, llegando a oscilar entre un año y seis meses y nueve años y seis meses de cárcel.
Los abogados recurrieron al Tribunal Constitucional, pero su demanda no fue admitida. Ante esta situación, las familias han decidido llevar el caso de los chicos de Altsasu alTribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH). La demanda deberá ser presentada antes del mes de enero.