Una protesta que apenas salió en el directo
Las cámaras y el equipo de realización rápidamente desvió el foco, y por eso muchos nos lo perdimos. Pero las personas que saltaron en la final del mundial en Moscú este pasado domingo a protestar eran las Pussy Riot, un conocido grupo activista ruso que se la tiene jurada a Putin.
El mejor gol del mundial fue el que le metieron las Pussy Riot a Putin.
— Maurice Echeverría (@mauech) July 16, 2018
En un comunicado, sus integrantes dijeron que ellas habían protagonizado la invasión al campo para denunciar el autoritario gobierno de Vladimir Putin, y posteriormente hicieron una serie de reivindicaciones en las redes sociales.
En el comunicado piden:
– Liberación de presos políticos
– Libertad para Oleg Sentsov
– Fin del arresto de manifestantes
– Fin de encarcelamiento de ciudadanos por publicaciones en redes sociales
– Permitir la competencia política en Rusia
– Que Rusia no invente cargos para encarcelar injustamente a la gente.
Oleg Sentsov es un cineasta ucraniano quien fue sentenciado en 2015 por lo que una corte militar rusa calificó de complot terrorista. Sentsov afirma que es inocente y ha realizado una huelga de hambre.
https://twitter.com/jmfmoran/status/1018848079422902273
Tras el salto al campo, el personal de seguridad sofocó rápidamente la invasión del campo de las activistas, vestidas de policía. Ellas se vistieron así para evidenciar qué ocurre cuando la «policía» entra en juego, en contraste con la imagen de la policía rusa durante el mundial.