El Gobierno anunció ayer la aprobación de una moratoria en el pago de las hipotecas para que “nadie sea desahuciado de su casa por atravesar una situación difícil”. Esto no es así para los que viven de alquiler.
No hay indicios de que el Gobierno vaya a tomar las mismas medidas para este grupo de personas, lo que se presupone ocasionará problemas sociales.
«En abril se va a producir una cascada de impagos en el alquiler, sin dudas», afirma Jaime Palomera, portavoz del Sindicato de Inquilinos. «Tienen que decidir si estos impagos se producen de forma caótica o de forma ordenada».
Palomera también se pone en el lugar de los arrendatarios: “más del 80% de los españoles que alquilan sus pisos son particulares, y muchos tendrían muchos problemas porque en algunos casos esa es la fuente de ingresos que tienen para sobrevivir, pagar su hipoteca… Estarías vistiendo un santo para desvestir otro».
«Tengo clientes que tienen una jubilación muy justita y tienen un pisito alquilado que les da 300 o 400 euros y con eso están bandeando su jubilación», cuenta el portavoz. Además, ha asegurado que si el Gobierno pone en esa «encerrona» a los propietarios, «mucha gente no pondría sus pisos en alquiler, y, si no hay pisos en el alquiler, suben los precios».
A su juicio, «lo que hay que potenciar verdaderamente es que no se pierdan los trabajos. Si la gente sigue cobrando, nadie va a dejar de pagar, por eso lo importante es reforzar a las empresas».
Por su parte, la Agencia Negociadora del Alquiler asegura que la solución a corto plazo sería «aplazamientos de pago de renta o reducciones temporales de las mismas», es decir, renegociar el alquiler directamente con el casero.