Un funcionario asturiano ha lanzado una propuesta para ayudar al país y a los afectados por el coronavirus de forma activa: ceder sus pagas extras a las arcas públicas.
Fernando García, trabajador de la Tesorería General de la Seguridad Social en Gijón, ha impulsado la iniciativa «Mi extra por mi país» para animar a más gente a que sigan sus pasos. Concretamente, alude a los políticos, comunicadores, funcionarios, personal de la Administración y de empresas y organismos públicos y pensionistas que puedan permitírselo.
«No podemos quedarnos mirando unos a otros esperando que sea el vecino el que dé el primer paso«, asegura García, anunciando la renuncia a su paga extraordinaria de 3.000 euros. «Los aplausos en los balcones están muy bien, la verdad es que animan, pero me preguntaba si había manera de comprometerse un poco más allá para aquellos que se lo puedan permitir».
«Todos tenemos amigos que han tenido que cerrar tiendas o que sus negocios han quedado sin actividad. No puede ser que mucha ciudadanía las esté pasando canutas y que a nosotros nunca nos afecte nada«. Considera que su gesto particular es una gota de agua, pero si cunde el ejemplo «el Estado podría destinar ese dinero a aliviar la situación; una empresa que tiene veinte trabajadores ahora tiene veinte problemas».
También lanza un mensaje directo a las grandes fortunas del país y al rey emérito: Juan Carlos I, para que done los 100 millones de euros recibidos de Arabia Saudí: «A lo mejor el problema no se lo quita, pero que el dinero no se lo quite Hacienda, que lo dé él; ¿para qué lo quiere con ochenta y pico años y si su hijo tampoco lo quiere?».