Trece monjas han fallecido en un convento en Livonia (Michigan, EE.UU.) a causa del nuevo coronavirus, 12 de ellas en solo un mes, entre el 10 de abril y el 10 de mayo, según informa ‘Global Sisters Report’. Todas residían en el convento de las Hermanas Felicias y tenían entre 79 y 99 años.
Después de ese mes, otras 18 monjas se contagiaron de Covid-19. Una de ellas murió el pasado 27 de junio, siendo la decimotercera fallecida. La hermana Mary Andrew Budinski, superiora del convento, ha contado que la enfermedad «se propagó como un incendio forestal».
Desde el 14 de marzo, la entrada de visitantes quedó prohibida, aunque esta prohibición no fue extendida a los trabajadores esenciales. Dos auxiliares de enfermería fueron las primeras en contagiarse.
«Eran maestras. Una bibliotecaria. Una directora de educación religiosa. Una secretaria del Estado Vaticano. La autora de una historia de 586 páginas de la congregación. Una organista. Una ayudó a su clase de segundo grado a crear un anuncio para Sopas Campbell. Una era enfermera y dirigió los viajes misioneros a Haití. Vivían juntas, rezaban juntas y trabajaban juntas», relata el ‘Global Sisters Report’.