Dos Mossos d’Esquadra han sido suspendidos de sus funciones por burlarse de una menor que acudió a denunciar una agresión sexual que había sufrido en una discoteca de Blanes en junio de 2019.
Los agentes dudaron incluso de la veracidad de su denuncia: «Muchas chicas vienen a hacer denuncias falsas, tú pareces una de esas«, dijo uno.
La víctima elevó una queja por el trato vejatorio de ambos agentes, lo que derivó en una investigación desde la división de asuntos internos del cuerpo que, a su vez, ha concluido que los mossos no actuaron correctamente y merecen una sanción.
La chica, que en ese momento era menor de edad, estuvo a punto de desistir y no denunciar a ambos agentes. Afortunadamente, su madre se percató de que le ocurría algo y gracias a las amigas de la víctima, que la acompañaron el día de la denuncia, consiguió descubrir lo que había pasado.
Ante esa situación, la madre decidió presentar una denuncia a los dos mossos. En septiembre, presentó una nueva queja a los Mossos d’Esquadra por el trato hacia su hija, que contó que «no se creyeron nada y no paraban de cuestionarme y reírse».