En medio de las protestas del movimiento Black Lives Matter a raíz del asesinato de George Floyd, el pasado 8 de junio un grupo de manifestantes derribaron la estatua del esclavista Edward Colston en Bristol (Gran Bretaña) y la tiraron al río.
Ahora, el artista londinense Marc Quinn ha colocado una nueva estatua mucho más coherente con el tiempo que vivimos: la de una manifestante negra. Esta nueva figura sustituye 125 años después de su colocación la de Colston, un traficante de personas esclavizadas que vivió en el siglo XVII.
Quinn realizó su obra mediante una impresora 3D con metal y resina, inspirándose en la manifestante Jen Reid. Esta protagonizó una poderosa fotografía cuando subió al pedestal de Colston, ya vacío, y levantó el puño. Fue el marido de Reid quien capturó la imagen.
El artista ha afirmado en una entrevista con ‘The Guardian’ que no pidió permiso al ayuntamiento, por lo que la obra estará allí de manera temporal hasta que se pronuncie el Ayuntamiento de Bristol.
A sculpture of a black woman who took part in a Black Lives Matter protest in Bristol has been erected on the plinth where a statue of slave trader Edward Colston used to stand
????: @BenBirchallUK pic.twitter.com/li43nQj9KC
— PA Media (@PA) July 15, 2020