El presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, parece estar determinado a llevar la contraria al mundo aun a costa de la salud de sus ciudadanos. Durante la pandemia del Covid-19, Trump se ha dedicado a lanzar un mensaje tras otro de desinformación sobre la enfermedad, pese a que su país es el más afectado por el virus.
Según los últimos datos de la Universidad Johns Hopkins, Estados Unidos ha registrado hasta el momento 2.839.436 casos de coronavirus y 129.676 fallecidos.
A pesar de que los datos son devastadores y completamente contundentes, el dirigente estadounidense ha dicho este sábado que la gran mayoría de casos de Covid-19 «son totalmente inofensivos».
«Ahora les hemos hecho pruebas a casi 40 millones de personas. Al realizarlo, mostramos casos, el 99% de los cuales son totalmente inofensivos, y resultados que ningún otro país puede mostrar porque ningún otro país tiene la cantidad de pruebas que nosotros tenemos», ha dicho Trump, reiterando el falso argumento de que aumento de casos se debe al aumento en el número de pruebas.
La Organización Mundial de la Salud ha informado de que el 20% de todas las personas que se contagian de coronavirus acaban lo suficientemente enfermas como para requerir oxígeno o atención hospitalaria.
Trump se ha negado en varias ocasiones a utilizar una mascarilla en espacios públicos argumentando que «no quiere dar el placer a los medios». También ha acusado a China y a la OMS de ser responsables de que el virus se haya extendido, ha sugerido a los ciudadanos ingerir desinfectante para curar el coronavirus y ha recomendado utilizar bufandas en vez de mascarillas.
