Ya pasó con la cuenta de Youtube del partido ultraderechista, y ahora es el turno de Twitter. La plataforma ha suspendido la cuenta oficial de Vox debido a que contiene mensajes que «incitan al odio».
Manuel Mariscal, vicesecretario de Comunicación del partido, ha comunicado este hecho, teorizando sobre que puede haber estado involucrado con presiones del gobierno.
Según Mariscal, la suspensión ha tenido lugar tras un intercambio de mensajes entre la cuenta y Adriana Lastra, del PSOE. Lastra acusó a los de Vox de «retrógrados», mientras que la formación se defendió afirmando que no pueden soportar que «con dinero público» se promueva «la pederastia», en referencia al programa Skolae en Navarra (educación sobre la igualdad de género).
Twitter comunicó al partido que si no eliminaba este último mensaje que incitaba al odio, eliminarían su cuenta. Los de Abascal se negaron.
«No lo haremos. Somos un partido legalmente constituido, somos tercera fuerza política en España, representamos a más de 3,6 millones de votantes y, como nosotros, miles de ciudadanos españoles están sufriendo la censura en Twitter y en otras redes sociales. Y decimos, ‘Basta'», se ha quejado Mariscal.
Según la versión del de Vox, Twitter ya se había comunicado con ellos el sábado informándoles de que estaban recibiendo quejas sobre el tuit, aunque no podían encontrar una infracción a las normas.
«¿Por qué Twitter cambió de opinión? ¿Recibió presiones de algunos ‘lobbies’? ¿Tal vez, del propio Gobierno?», se plantea Mariscal.