Un hombre se ha declarado culpable de pagar un Lamborghini Huracán de 260.000 euros con ayudas federales que se concedían a empresas en Florida, Estados Unidos, afectadas por el COVID-19.
El acusado, David Hines, obtuvo del Estado 3,9 millones de dólares y, además de comprarse el coche, se compró otros lujosos caprichos. Fue detenido en julio de 2020 tras ser acusado por Fraude, convirtiéndose en un caso muy viral en el estado por el brutal impacto económico que ha tenido el COVID-19.
Hines solicitó ayudas al Programa de Protección de Salarios a nombres de diferentes empresas con la excusa de pagarle el salario a varios de sus trabajadores que sufrieron los efectos del cierre de las actividades en el confinamiento. Tras las sospechas, se descubrió que no había pagado ningún sueldo, pero sí se había comprado objetos de lujo y alquilado habitaciones en hoteles de Miami.
Finalmente, Hives se declaró culpable ante un tribunal al sur de Florida por fraude, y recibirá su sentencia a partir de abril.