Ocurrió el martes 16 de julio, cuando unos transeúntes avisaron a la policía de que había una mujer en la calle aturdida, con moratones en las piernas, brazos y sangrando por la boca.
Tras llevarla al hospital Clínic, los agentes activaron la unidad de investigación ante una posible víctima de agresión sexual. La chica les contó a los Mossos que se encontraba durmiendo en la estación del Nord cuando cuatro hombres la despertaron a golpes y la arrastraron a un solar abandonado del Poblenou, donde había un campamento.
La joven hizo mención de un matrimonio que «mandaba» en el campamento, y que la mujer, «morena y muy gorda», también la maltrató. La mujer, de nacionalidad Rusa, logró escapar y aseguró que sus agresores la drogaron durante los dos días que estuvo secuestrada ya que no se acuerda de nada.
En la investigación realizada, las autoridades lograron detener a tres de los sospechosos del campamento. Tras pasar a disposición judicial, los detenidos -con antecedentes- fueron puestos en libertad con cargos por agresión sexual y detención ilegal: ni Fiscalía ni la acusación de la víctima pidieron prisión provisional.
El titular del Juzgado de Instrucción número 29 de Barcelona ha decidido la libertad provisional junto a la retirado de pasaporte de los dos detenidos, prohibición de salir de España y la comparecencia semanal en el juzgado.