Chris Grailey, un negacionista del COVID-19 que ha resultado infectado de gravedad, ha intentado concienciar a la población desde una cama del hospital y con ayuda respiratoria: «fui el primero en decir que el coronavirus era todo mentira».
«Lo cogí en Tenerife pensando que era invencible, sin llevar una mascarilla. Pagué el precio. No tengo ningún problema de salud subyacente. No quiero que nadie cometa los mismos errores que yo», ha explicado casi sin aliento en un vídeo para Mirror.
«Estuve enfermo durante la mayor parte de las vacaciones, perdí el gusto, el olfato, tuve sudores fríos. Pero se puso mucho peor cuando volví a casa», ha contado el británico, explicando que en cuatro días le diagnosticaron coronavirus y una neumonía aguda a causa del virus. «Ahora estoy en cuidados intensivos, esperando recibir más tratamiento, y sin saber si saldré del otro lado», se lamenta.
«Quiero que tengas en cuenta este mensaje porque le puede pasar a cualquiera, por favor, cuídense», pide Grailey. «No puedo respirar, caminar, moverme. Soy como un zombi. Estoy tomando cuatro antibióticos diferentes, esteroides, oxígeno todo el día y con más agujeros en mi brazo que un drogadicto. Esto es REAL, es la vida real matándome», cuenta en su Facebook.
«Así que antes de pensar en ir a fiestas en casas, miren esa foto e imaginen que podrían ser ustedes […] Puede llegar a cualquiera, tengo 29 años sin ninguna condición de salud subyacente. Esta mierda es seria. Por favor, por favor, despierten chicos. Hay más en la vida que esto. La vida es demasiado corta para arriesgar su salud. He aprendido de la manera más dura que no quiero que la gente cometa los mismos errores que yo», pide.
