Dos policías locales han sido víctimas de una brutal paliza por parte de un padre y sus dos hijos después de que los agentes reprendieran a uno de los menores por no llevar puesta la mascarilla.
Los hechos tuvieron lugar la tarde del pasado viernes en la localidad malagueña de Alhaurín de la Torre. Los dos agentes, que iban de paisano, realizaban labores de vigilancia para asegurar el cumplimiento de las medidas sanitarias cuando observaron a un grupo de menores reunidos en la Plaza de España. Superaban el límite de seis personas fijado por la Junta e incluso algunos de ellos iban sin mascarilla.
Los agentes decidieron instarles a que pusieran la mascarilla y se dispersaran, dejándolos marchar sin multarlos. Sin embargo, poco después volvieron a encontrar a uno de los jóvenes junto con otro grupo en un parque de la localidad y sin hacer uso de la mascarilla. Ante la situación, los policías decidieron llevarlo hasta su domicilio para informar a sus padres de la infracción cometida.
Pero al llegar a la vivienda del menor, situada en el centro de la localidad, el padre y el hermano mayor edad del menor que iba sin mascarilla les estaban esperando y, sin previo aviso, comenzaron a propinar patadas y puñetazos a los agentes. El menor también se unió a la brutal agresión, que ocurrió en plena calle y fue grabada por unos vecinos.
Los policías se vieron obligados a pedir refuerzos a otra patrulla que estaba de servicio, con ayuda de la cual consiguieron controlar la situación y detener a los tres agresores. Los agentes tienen que ser trasladados al hospital con heridas graves en el rostro. Entre ellas, fractura de tabique nasal y una brecha que ha requerido puntos de sutura en la ceja.
